miércoles, 24 de octubre de 2012

Redford I need you










  Tenía que ir a la peluquería, pero esta vez quise que fuese algo diferente al resto de las demás veces. Me quité el traje de cola y saqué mis pies, blanquecinos por la falta de sol, y con unos pantalones amplios, desnuda de cintura para arriba y descalza llegué al remanso de un río para arreglar mi cabello.


     Recordé un anuncio de hace ya tiempo, donde Victoria Abril llamaba implorando necesidad a su peluquero, y éste acudía raudo y veloz a cumplir sus deseos. Así que ni corta ni perezosa, abrí la mesita portátil y puse sobre ella mi jarra de nácar llena de agua dulce. Me senté sobre una roca mientras observaba mis pies jugueteando con las transparentes aguas que corrían allí, cerré mis ojos e invoqué a mi pirata Robert.


     Apareció tras de mí con una gran toalla blanca con la que cubrió mis hombros, recorriéndome un agradable calor corporal con su abrigo. Me miró como quién espera una respuesta verbal…….-Quiero que hoy seas tú mi peluquero personal-.


     Esbozó una amplia sonrisa Profident, agarró con una de sus manos todo mi pelo y con la otra asió la nacarada jarra y comenzó a llover agua dulce en mi cabeza mientras respondía…-Como desees…-


     Arrancó otra sonrisa en mí a la par que enjabonaba mi cabello y tiraba de mi cabeza suavemente hacia atrás. Respirando el aire fresco de aquel lugar y la candidez de sus manos masajeando mi cuero cabelludo, mi mente casquivana no tardó mucho en divagar cuál sería mi siguiente necesidad….

No hay comentarios:

Publicar un comentario