“Empezar de nuevo
Sin
destino y sin tener
Un
camino cierto que, me enseñe a no perder la fe
Y
escapar de este dolor sin pensar en lo que fue,
¿cuánto
aguanta un corazón sin el latido de creer?
En
lo bello en la verdad de la esperanza
De
esta sed de amar
En
los sentimientos que se quedan
Sueños
que perduraran.
Y
busqué y subí y fui preso entre las alas del amor
Sin
distancia y sin recuerdos
En
las arenas de esta soledad
Presa
de un silencio roto
Hijos
del amanecer
Que
nunca alcanzó esa luz, tan confundida en el placer
Y
cierro los ojos, sólo para comprender
Cuánto
aguanta un corazón sin el latido de creer..”
Habana Blues
Y así
tendrá que ser, tendremos que empezar de nuevo. Tendremos que volver a creer,
que volver a reír. Lo que no tendremos es que olvidar. Que todo el esfuerzo, todas
las pérdidas, todos los desencuentros, los desencantos, la resistencia, la
resiliencia…que todo sirva para hacernos mirar dónde estamos y hacia dónde
vamos. Qué es lo que realmente necesitamos y de qué y cuánto podemos
prescindir.
Y lo más importante, aprender a vivir. Todos los que
queden, tendrán una segunda oportunidad que no se les brindó a todos aquellos
que se tuvieron que ir. Utilicemos las oportunidades y simplemente vivamos.
Después de todo, este paseo por aquí, sólo consiste en eso.
Con té y con fé